Receta de la mama y de la buela. Tradicional como pocas, nutritiva y deliciosa. Sin parangón.
Fíjate en la foto de ingredientes básicos, ajo y cebolla y pan duro, comida de pobres, espárragos trigueros que antaño se recogían salvajes en el campo. Este tipo de guisos de tanta tradición tienen mucho encanto, porque son muy sencillos, con ingredientes muy básicos y están increiblemente suculentos. Si no lo conoces tienes que hacerlo, y si lo conoces seguro que te lo he recordado y ya estás pensando en comprar espárragos…
Empezaremos en una cazuela grande, con el fondo cubierto de AOVE. Cuando esté caliente incorporamos una cebolla grande, 3 dientes de ajo y un buen trozo de pan duro. Luego vamos a batirlo todo, así que la cebolla y los ajos hay que pelarlos pero cortarlos en trozos grandes.
A fuego medio bajo vamos sofríendo hasta que los ingredientes empiecen a coger un tono dorado y bonito, sobre todo el pan, que empezará a tostarse. Entonces sacamos con la espumadera todos los ingredientes y los ponemos en el vaso de la batidora. La receta original es un majao en un mortero tradicional, si tienes herramienta, tiempo y ganas, desde luego es lo suyo. Si no, mete el turbo a la batidora y en un minuto estará listo. Añade agua para facilitar la labor.
En el mismo aceite echamos dos manojos de espárragos trigueros, a los que habremos limpiado, quitado el tallo y cortado en tres trozos cada uno. Se sube el fuego y se saltean como un par de minutos. A continuación bajamos el fuego y añadiremos una cucharadita de ñora molida y otra de pimentón. Damos un par de vueltas para que se mezcle todo bien e incorporamos el majao.
Subimos el fuego y añadimos sal y pimienta. Pelamos 3 patatas medianas y las cortamos en rodajas, que no sean demasiado finas, pero tampoco muy gordas. Las incorporamos a la cazuela y cubrimos todo con agua. Subimos el fuego para que empiece a hervir y en ese momento se baja y se tapa. Se deja haciendo chupchup una media hora. La patata debe quedar un poco tierna, pero tampoco demasiado.
Incorporamos el arroz, y si es necesario incorporamos más agua. Se deja destapado a fuego medio hasta que el arroz cueza. Se sirve inmediatamente.
Plato único excepcional, no necesita nada más. La única pega es que al llevar patatas no se puede congelar, aunque siempre se puede hacer el sofrito y reservar para congelar justo antes de incorporar las patatas. ¡Buen provecho!
- 2 tazas de café de arroz
- 3 dientes de ajo
- una cebolla grande
- un trozo de pan duro
- 2 manojos de espárragos
- 3 patatas medianas
- una cucharada de ñora molida
- una cucharada de pimentón
- sal, pimienta y AOVE
MANUFACTURA
- Se pelan los ajos y la cebolla y se parten en trozos grandes
- En una cazuela con el fondo de AOVE se sofríen junto con el pan, hasta que cojan tono dorado
- Se aparta al vaso de la batidora y se bate todo con un poco de agua
- En el mismo aceite se echan los espárragos trigueros y se saltean a fuego vivo durante un par de minutos.
- Se baja el fuego y se añade el pimentón y la ñora molida
- Se salte un par de segundos y se añade el majado, sal y pimienta
- Se incorporan las patatas peladas y cortadas a rodajas no demasiado finas
- Se cubre con agua y se sube a fuego vivo hasta que empieza a hervir
- Se baja el fuego se tapa y se deja cocinando media hora
- Se incorpora el arroz y la cantidad de agua que haga falta
- Se cuece el arroz y se sirve inmediatamente